Las frecuencias en las que actúa el bajo son bastante más grabes que las de guitarra, por lo que los conos o bocinas de un amplificador de guitarra no están preparados. Por esto no es recomendable conectar un bajo a un amplificador de guitarra, pues las vibraciones terminaran dañándolo.
En experiencia propia, un amigo utilizaba su bajo conectado al amplificador de guitarra, y si bien hacía el apaño, a la hora de conectar la guitarra se escuchaba mal. Por lo que si de todas formas quieres hacerlo, olvídate de que vuelva a servir como amplificador de guitarra.
En general, el rango de frecuencias del bajo eléctrico puede oscilar entre los 40 Hz (sub-graves) y los 1.000 (agudos) Hz aproximadamente. Las notas más bajas del bajo eléctrico suelen estar alrededor de los 40 Hz, mientras que las notas más altas pueden alcanzar los 1.000 Hz o incluso más. Cabe destacar que, aunque las frecuencias bajas son muy importantes para el sonido del bajo, las frecuencias medias y altas también juegan un papel fundamental en la definición del sonido y la articulación de las notas.
…Y puedo conectarlo a pedales de guitarra?
En este caso sí.
A diferencia de las membranas de los conos del amplificador, el pedal no reproduce el sonido, por lo tanto, no se daña por estas frecuencias bajas. El único problema que te puede surgir, es que el sonido no te guste. Pues al ser diseñados para guitarra, su fuerte está en los sonidos altos y medios, haciéndote perder frecuencias bajas.
En consecuencia, si se puede recurrir a pedales de guitarras, la situación y el bolsillo lo ameritan, aunque tarde o temprano sentirás que tu sonido pierde fuerza.
Efectos de bajo que te podrían ayudar
Estos son algunos efectos de sonido comunes que se pueden utilizar en el bajo eléctrico para crear diferentes texturas y añadir expresividad al sonido:
Distorsión: es una gama efectos que añade saturación y distorsión al sonido del bajo, haciéndolo más agresivo y presente. Esto puede conseguirse utilizando un “pedal de ganancia” (overdrive, distorsion, fuzz, etc) o saturando el amplificador de forma natural.
Compresión: Se trata de un efecto que reduce la dinámica del sonido, de modo que “empareja el sonido de tus notas”. Esto puede ayudar a controlar el sonido del bajo y mezclarlo mejor con otros instrumentos.
Chorus: es un efecto que crea una especie de señal paralela, que suena diferente a tu sonido limpio.
Octavador: efecto que duplica la señal de bajo hacia arriba o hacia abajo una, dos o más octavas. Este efecto puede utilizarse para crear líneas de bajo más complejas o para imitar el sonido de otros instrumentos.
Wah-wah: Este efecto permite modificar el sonido del bajo mediante un pedal que controla un filtro. Este efecto se utiliza a menudo en funk y otros estilos en los que se desea un sonido de bajo expresivo.
No seas el clavo golpeado por el martillo de la sociedad… Informático y bajista de los Clavos Oxidados de Badajos.